"Sin decirlo explícitamente, en la segunda parte de este libro discutimos algunas de las consecuencias de la globalización financiera. Al considerar que a la tasa de interés internacional (más los riesgos apropiados) los países pueden endeudarse por el exceso de gasto doméstico sobre el producto, o prestar el exceso de producto sobre gasto, estábamos suponiendo una integración financiera perfecta con el mundo. ¿Qué ventajas y desventajas tiene este tipo de globalización? Enfoquemos la respuesta a esa pregunta desde los dos puntos de vista que adoptamos en este libro: ¿cómo afecta la integración financiera a la tasa de crecimiento económico? ¿cómo influye sobre la volatildad de corto plazo?
Desde el punto de vista teórico, la integración financiera puede ser favorable para el crecimiento sobre todo para los países que, de otro modo, enfrentarían una tasa de interés más alta. Con una tasa de interés menor, más proyectos de inversión son redituables. Dijimos también que la globalización financiera permite como un tipo especial de flujo de capital la globalización empresarial, que es una vía por la cual países menos desarrollados pueden acceder a tecnologías mejores. La evidencia, sin embargo, no es concluyente. No está claro que, a igualdad de otros factores, los países más abiertos a los flujos de capital crezcan más rápido. En gran parte, los beneficios temporales de la integración financiera se han visto contrapesados –a veces con creces– por los episodios de sudden stops que discutimos en el Capítulo XX.
Los sudden stops han contribuido, también, a la volatilidad de las economías abiertas a los flujos de capital. En principio, la posibilidad de endeudarse debería tener un efecto favorable sobre la estabilidad del consumo (aunque no del producto) a lo largo del tiempo. En el Capítulo XX establecimos que así como una persona puede endeudarse para consumir en un período de bajos ingresos, un país puede endeudarse para que su consumo no caiga tanto cuando tiene una crisis productiva temporaria. El nivel de consumo, entonces, podría ser más estable en el tiempo gracias a los movimientos de capital. Sin embargo, la ocurrencia de frenadas súbitas, con el consecuente impacto sobre el producto y muchas veces sobre el consumo (por obra de un efecto ingreso y del aumento de la tasa de interés) ha hecho que el consumo sea más inestable en los países en desarrollo durante la década del 90 –una época de globalización financiera– que en tiempos anteriores."
Esto lo tuve que escribir yo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario