Me escribe mi hombre en Wall Street:
Parece que Bush se despertó. Bernanke es una gran elección.
Algunos comentaristas de mercado (incluyendo el mismísimo FT en su tapa de hoy) sugirieron que la suba (de 5 puntos basicos) de la tasa nominal americana de 10 años fue producto de que el mercado percibía a Bernanke como un "mano blanda" al momento de combatir la inflación. Nada mas distanciado de la realidad.
Es cierto que en el pasado Bernanke (que fue miembro del directorio de la FED) se mostró abiertamente partidario de una política monetaria expansiva ("tirar plata de helicópteros" de ser necesario) pero sería un error concluir --solamente a partir de esto-- que la suba de la tasa de interés nominal señala un deterioro de la expectativa inflacionaria y escepticismo sobre la capacidad de Bernanke de combatir la inflación.
La realidad es que esa recomendación de Bernanke es inseparable del contexto deflacionario en el cual la propuso. Lejos de mostrar a un Bernanke blando, lo que esta propuesta muestra es un Bernanke seriamente comprometido con el mandato de estabilidad de precios. De hecho la sensibilidad que demuestra Bernanke a los riesgos de-flacionarios debería sugerir que, si la coyuntura generara riesgos in-flacionarios, Bernanke se inclinaría por dureza monetaria con la misma rapidez y contundencia. En definitiva: Bernanke no es ni blando ni duro, simplemente responsable.
Con respecto a la reacción del mercado de ayer vale la pena tener en cuenta que la suba de tasa nominal se produjo a la par de una suba en la tasa de los TIPs, bonos indexados por inflación. Tomado en conjunto ese movimiento demuestra que ayer subió la tasa real de interés mientras que las expectativas inflacionarias, lejos de aumentar ante un Bernanke supuestamente blando, se mantuvieron inalteradas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario