domingo, julio 27, 2008

El Dilema de Messi: una extensión


El posteo anterior, analizando las opciones de Messi ante una convocatoria, generaron algunos comentarios interesantes, pero el punto central acá y acá es que "el juego es secuencial". Estamos de acuerdo.

En un juego estático, dadas la estructura de preferencias delineada en el post anterior, Messi tiene una estrategia fuerte: defeccionar. Ante este escenario, el club optará por sancionar al jugador para preservar (al menos) su autoridad ante el plantel y exponer al resto las prioridades de la dirigencia del club. En este sentido, un juego estático conduce a un equilibrio de defección-sanción, tal como se observa en la figura siguiente.


Sin embargo, tal como se decía en el post inicial, se trata de un juego secuencial: los jugadores [léase, club vs. Messi] de esta partida no tienen que mostrar sus cartas simultáneamente, sino que pueden esperar a que el otro juegue: una vez que sea conocida la opción de la contra-parte, resultarán posiciones de equilibrio totalmente diferentes.

Supongamos que Messi es el primero en mover. En ese caso, el futbolista sabe que al club le convendrá: a.) sancionar si defecciona, a fin de preservar la autoridad; y b.) no sancionar si coopera, a fin de premiar la lealtad. Ante esta situación, el equilibrio será cooperar-no sanción, tal como se observa en la figura de abajo.


Ahora bien, en este caso el club parece haber movido primero, al acordar una renegociación de los ingresos del jugador. De esta manera, el club reduce sustantivamente su capacidad de acción porque queda atado de manos para "castigar" la defección del futbolista.*

Su máximo margen de acción estaba dado por la posibilidad de bloquear el incremento salarial de Messi, al cual no estaba obligado ni legal ni contractualmente: el jugador tenía contrato hasta 2014 con una cláusula de recisión astronómica (150M de euros). Por lo cual, acordado el nuevo salario (y en el caso que no hubiera ninguna cláusula no difundida que impidiera implícita o explícitamente su participación en los Juegos), el club resignó su capacidad de sanción real y la posición de equilibrio se desplaza hacia la defección, tal como se observa en la figura siguiente.


En este escenario, el futbolista tiene todo dado para defeccionar exitosamente. Pero aquí, tal como señala sagaz la Princesa Sukimuki, falta un jugador: la Fédération Internationale de Football Association. Sin embargo, la intervención de la FIFA viene a "atar" el comportamiento de Barcelona:

a.) obligando a ceder el jugador, amparado en la reglamentación vigente; aún al límite de suspenderlo por el tiempo que dure el torneo si no viaja a Beijing.

b.) haciendo silencio sobre el tema (o presentando sólo acciones declarativas), dando a entender que si el club fuerza al jugador a quedarse no habrá ninguna sanción.

En ese caso, Messi dispondrá de información completa sobre las opciones de la dirigencia, sin pagar ningún costo. Por ese motivo, aquí creemos que Messi está esperando a reducir al mínimo sus costos, esperando que sea la FIFA quien destrabe el litigio.

En el fondo, aquí acordamos con Maradona: una cosa es aversión al riesgo, otra es no tomar ninguno. Tal como se argumenta en el post inicial, la capacidad de sanción del club es mínima si hoy Messi hace su bolsito y se va al aeropuerto; porque ató sus manos al firmar un extemporáneo acuerdo salarial.

Ahora bien, alguien nos dice que, en cualquier caso, Messi no es fundamental para obtener la medalla. Todo esto no fue porque la presencia/ausencia de Messi nos quite el sueño, sino para modelizar el trasfondo de un proceso de toma de decisiones, aunque (reconozco que) si Boca negaba al ficus no hubiera posteado nada.


(*) Por supuesto, el club tiene más recursos y puede criticarlo públicamente, multarlo, separarlo del plantel o todas esas cosas juntas. Pero aún en esa circunstancia el futbolista tiene la seguridad de su contrato (siempre que no hubiera ninguna cláusula no difundida que impidiera implícita o explícitamente su participación en los Juegos) y el club no puede tan fácilmente sancionar a una de sus estrellas.

Aureliano Buendía

[Versión original, acá]

pd. Rollo, una vez más, gracias por permitir este juego.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Volvé Rollo!!!

Anónimo dijo...

Que sarta de pelotudeces

Anónimo dijo...

q perdida de tiempo haber leido este post..

el_bost dijo...

Lo que Messi no cobra seguro si no juega son los premios. Hay que ver si los del Barsa no se avivaron y pusieron una clausula "si jugas todas las rondas de la champions y llegamos a ... te pagamos ..."

Igual, estoy con Diego, Messi es un cagon.

Lo unico que no entiendo es que el recambio no sea el Pipita.

Diego dijo...

La teoría de los juegos no sirve para estas cosas.

Anónimo dijo...

No sean duro con el pibe que si bien la matriz de pagos está traída de los pelos, como juego académico vale la pena. Encima, está publicando a las 3 y pico de la mañana de un sábado!!!!. Un fanático o un pedido de ayuda para que se consiga una vida

Pablo dijo...

se, lástima que todo sea por un simple chico. El equipo va a seguir siendo el equipo con y sin Messi.

Y al mismo Messi posiblmente le venga bien no ir a la selección, así pueda descansar y entrenarse bien, y no exigirse, y que vaya directamente al mundial.

LO que pasa es que el idólatra pueblo argentino lo va a condenar, porque todos parece estamos esperando depender de alguien. Cuando carajo lo van a entender, la cosa es el EQUIPO, EL EQUIPO!! en todo, en el futbol, en política, en el trabajo...;q vamo a hacer

Anónimo dijo...

no entendi nada en tu puto Blog!

Aureliano Buendía dijo...

Anónimo 3:15: Se intentó que los pagos no estuvieran "traidos de los pelos". La idea es:

a.) El club quiere por sobre todo que el jugador se quede (coopere), pero prefiere hacerlo sin hacerle pagar costos. Pero si el jugador no coopera, sancionarlo puede servir para transmitir una señal de autoridad al resto del grupo.

b.) El jugador tiene las prioridades analizadas en el post anterior.

Esas estructuras de prioridades arroja (si no cometí ningún error) la matriz de pagos presentada arriba. Ahora bien, quizás me mandé una macana y hay cosas para corregir.

Diego: No entiendo por qué no sirve la Teoría de Juegos para esto. A fin de cuentas tanto el futbolista como el club son jugadores racionales, con intereses y prioridades definibles, etc.

"sarta de pelotudeces", "tu puto Blog!", esos sí que son argumentos fuertes...