martes, diciembre 19, 2006

gresham's law

La muchas veces malentendida Ley de Gresham ("la moneda mala desplaza a la buena") en verdad alude a una relación entre el valor intrínseco -metálico, por ejemplo- de la moneda y su valor legal. No quiere decir que la moneda de plata va a reemplazar a la de oro, si pueden circular las dos. Si la de plata tiene una equivalencia legal con la de oro de 1 a 15 -ie., si podés pagar un impuesto de 1 peso oro con 15 pesos de plata- pero en el mercado de metales la relación es 1 a 20, entonces todo el mundo va a guardarse la moneda de oro cada vez que le pase por las manos, y largar las de plata, que van a circular. Pero si, con la tasa legal a 1-15, la tasa en el mercado de metales es 1-10, la que va a circular es la de oro. Guardo la plata, que en el mercado de metales vale más que como instrumento monetario, y largo el oro.*

¿A qué viene esto? Beware! No largues las monedas de 5 centavos. Creo que el cobre bajó un poco desde aquella vez que hablábamos del culito de Bachelet. Pero así y todo, el Banco Central argentino ha decidido cambiar el metal con el que fabrica las monedas de 5 y 10 centavos, porque sale 7 centavos (aquí el link de Ámbito, con clave). Es decir: la moneda de 5 vale 7! Guardala, pero no le digas a nadie.


*Digo muchas veces malentendida porque, p.ej., recuerdo un artículo de Calvo y Guidotti sobre la dolarización de facto que se llamaba "Gresham's law in reverse", como que el dólar reemplazaba al austral o al peso a pesar de ser una moneda peor. Creo que eso no tiene nada que ver con la ley de Greshman, salvo como metáfora.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Aqui en Gran Bretaña está pasando algo similar con las monedas de 0.01 y 0.02 pounds.
http://www.ft.com/cms/s/1e1e0776-f132-11da-940b-0000779e2340.html
Aborda el tema desde la perspectiva del layman.

Anónimo dijo...

propongo revaluar el peso en 2 séptimas partes y mantener la monedita de cobre.

Anónimo dijo...

y ahora vamos a juntar monedas para venderlas por cobre, eso ya paso hace 20 años, me parece raro que nadie lo recuerde, con el niquel